Garantizar la disponibilidad inmediata de medicinas tendría que ser una de las acciones primordiales que surjan, en el marco de la declaratoria de crisis humanitaria en salud que hizo la Asamblea Nacional en Venezuela.
Así lo señaló el presidente de la Organización StopVIH, Jhonatan Rodríguez, al considerar que en efecto la situación en el sector está en niveles críticos, y una de las razones es la falla en más de 80% de los medicamentos esenciales relacionados con patologías crónicas y enfermedades eventuales. «Nuestra Organización hace monitoreo permanente de las personas que viven con VIH y mantenemos contacto con otras ONG del país, y la coincidencia en todas las regiones es la falla de reactivos para pruebas de control como CD4 y carga viral, también para realizar detección de VIH, además en el mes de enero hubo fallas en el suministro de antirretrovirales Truvada, Viraday, Nevirapina, así como de otros fármacos como antibióticos, antialérgicos, antigripales, antihipertensivos, psicotrópicos, ivermectina, entre otros medicamentos para tratar enfermedades oportunistas».
La Asamblea Nacional tiene la potestad para actuar con urgencia, y lo que es más importante tiene el deber de hacerlo porque ostenta el Poder del pueblo, además debe velar por el cumplimiento de la Constitución Nacional que en su artículo 83 asegura que el Estado es el garante de la salud, y en la Declaración de los Derechos Humanos, artículo 25, la salud también es un derecho constituido.
Una de las alternativas viables a corto plazo ante la declaratoria de crisis humanitaria, es permitir el envío y recepción de medicinas desde otros países o ciudades de Venezuela, dice Rodríguez, y no duda que muchas naciones estén dispuestas a ayudar al país frente a esa situación que atenta contra la vida del pueblo.
Asimismo, destaca que debe exigirse la publicación de los boletines epidemiológicos por el Ministerio de Salud, pues esas estadísticas son las que permitirán fijar estrategias acordes con la realidad y evitar probablemente hacer esfuerzos que en medio de la crisis no tengan impacto positivo en la población.
Dijo que es urgente generar planes y programas de prevención y educación en salud, porque ante los problemas generalizados que viene registrando el país, es un hecho que la salud de los venezolanos se ha debilitado por problemas de alimentación, estrés, enfermedades relacionadas con el agua y aseo como la escabiosis, embarazos no planificados, todo lo cual representa un problema de salud pública preocupante.
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